viernes, 29 de mayo de 2020

Historia del fútbol argentino - 1934 - Mundial de Italia

Antes de clasificarse campeón, Italia tuvo que superar a España en un partido desempate. El seleccionado nacional fue superado por Suecia en su presentación, pero, paradójicamente, cuatro argentinos compitieron en el país ganador.

El punto de partida estaba dado. En adelante, los propulsores del campeonato mundial no tendrían los inconvenientes que con tanto esfuerzo pudieron ser superados en la edición anterior. El éxito, más económico que deportivo en Montevideo, consolidó la realización del mango trofeo, ya que en 1934 se tuvo una clara comprobación con el aumento de inscriptos, cuyo total alcanzó a 32 países, incluyendo 5 solicitudes que llegaron fuera de término, pese a lo cual el comité organizador las aceptó.
Si bien se trató de una actitud que contrariaba la regla, la decisión pareció atinada, pues se consideró como un gesto amistoso, muy atendible a la época en la que se procuró afianzar el nivel competitivo del certamen. Una de las inscripciones que llegó tarde a la FIFA fue la de Argentina, lo que constituyó una muestra más de la desorganización de nuestros dirigentes. Además, para destacar el hecho negativo de que la Selección compitió con un equipo de tercer orden. Era obligatorio contar para tan importante desafío con un equipo que hiciera honor a los prestigios ganados con la medalla de plata conquistada en Amsterdam 1928 y el subcampeonato de Montevideo en 1930.

Selección Argentina en el Mundial de Italia 1934

Resultó poco ético, y en cierto modo irreverente para los organizadores, la determinación de acudir con un plantel de limitados recursos. Más aún, porque si bien el fútbol argentino no pasó por su mejor época, igualmente contaba con elementos suficientes como para haber formado un conjunto que seguramente hubiera cumplido un desempeño destacado. El improvisado seleccionado argentino tuvo un desempeño mediocre. Un par de errores del arquero Freschi le costaron la derrota en el partido que Suecia se impuso por 3-2.
Ese fue el preludio de un ridículo aislamiento de nuestro fútbol que, por mucho tiempo, le dio la espalda a las competencias mundiales. Los dirigentes subestimaron el máximo certamen y concedieron vital importancia al campeonato de primera división. Y si bien ésta es una atención que debe ser primordial, ya que la categoría futbolística de un país se alcanza a través de su campeonato superior, no pareció aconsejable eludir una confrontación que pudo brindar los éxitos deportivos a los que siempre debería aspirarse.

Al contrario de lo que ocurrió en Montevideo, fue necesario disputar partidos clasificatorios para que intervinieran 16 países. Lo insólito consistió en que también tuvo que jugarlos Italia, país organizador, siendo una grave falla ya que un campeonato mundial no podía disputarse sin el país anfitrión (Aunque el error fue corregido de inmediato).
Fue lamentable la ausencia de los uruguayos, que decidieron no intervenir por una razón de amor propio harto justificada, pues se recordó el boicot que los europeos le hicieron en 1930. Y como uno de los que generó la deserción fue Italia, pareció natural que los uruguayos devolvieran el desaire.

                                                                  Equipo de la Italia campeona de 1934
Las figuras de Italia, y del Mundial. Ángelo Schiavio y Giuseppe Meazza, dos de los delanteros que alzaron la copa

En el campeonato Mundial de 1934 se realizó un cambio importante en la forma de competir. Por medio de un sorteo se dispuso un sistema de eliminación directa de los conjuntos participantes. Y si bien un certamen exige que se acorte su duración, no podía admitirse que una delegación efectuara un viaje tan largo para jugar apenas un encuentro. Pero algunas fallas en el reglamento de la Copa del Mundo fueron eliminándose gradualmente, atribuibles a la inexperiencia propia de una competición que estaba en sus albores.
Sin embargo, es para elogiar el trabajo de los dirigentes brasileños, cuyos equipos estuvieron representados en todos los certámenes, porque dieron un ejemplo de perseverancia y fervor deportivo que más adelante tuvo su recompensa.

Otro de lo datos sobresalientes fue la importancia que Benito Mussolini le concedió al certamen, porque no sólo alentó a los futbolistas, sino que también asistió a todos los partidos que se disputaron.
El líder italiano, también conocido como "El Duce", puso al servicio de la victoria local todo su interés y esfuerzos. Además, intervino personalmente para dotar a los futbolistas de un lugar de concentración apropiado. El saludo fascista de los jugadores campeones y el fervor con que fueron celebrados sus triunfos dejaron el amargo saber de la exacerbación de un falso nacionalismo al servicio de un proyecto totalitario y corporativista.

Meazza convierte el gol de la victoria en el segundo partido contra España. Los visitantes reclamaron una falta contra su arquero
Un cotejo fundamental del campeonato fue el que sostuvieron Italia y España, en el que los locales desarrollaron un juego brusco. Empataron en un gol y ambos conjuntos se enfrentaron nuevamente al día siguiente, ocasión en la que los españoles presentaron un equipo diezmado por la ausencia de varios titulares. En esa oportunidad, los "tanos" ganaron por 1-0.
El conjunto austriaco, considerado el máximo favorito a ganar el título, llegó a la rueda final, aunque cayó en el cotejo por el tercer puesto frente a Alemania por 3-2.
En el encuentro decisivo, Italia superó a Checoslovaquia por 2-1 en lo que fue un partido emotivo. A pesar de que el combinado nacional no estuvo bien representado en ese certamen, 4 futbolistas argentinos integraron el plantel del campeón del mundo. Guaita y Orsi, desequilibrantes en el partido final, y Monti y Demaría, que también formaron parte del conjunto italiano, que apareció predispuesto a conquistar el torneo de cualquiera manera, como terminó haciéndolo.

Foto de Italia campeón. Los jugadores llevan en andas al DT Victorio Pozzo

Atilio García, figura de la época

Historia del fútbol argentino - 1934 - Números finales

A pesar de la holgada diferencia que consiguió Boca durante la fase final del torneo, tan solo ganó el torneo por un punto de diferencia.


El campeón fue el equipo más goleador, mientras que el escolta el menos goleado. Por su parte, el menos efectivo fue la unión Atlanta-Argentinos Juniors, que además fue el más vulnerado.


Si bien en la tabla general hay 3 jugadores de Boca, sorprende que con la cantidad de goles que hizo, no aparezca ninguno en el top5.

Postal de la cancha de Boca Juniors. Así veían sus hinchas al equipo.

Historia del fútbol argentino - 1934 - La consagración de Boca

A partir de la tercera rueda, el campeonato perdió atracción como consecuencia no sólo del afianzamiento de Boca en el primer puesto, sino también a causa de una merma en el rendimiento de los demás equipos.

Así fue como al disputarse la 27ma jornada, Boca, que se impuso ante Chacarita por 3-1, quedó en el primer puesto con 3 puntos de ventaja sobre Independiente, que perdió ante River 1-0, y San Lorenzo, que igualó con Estudiantes. En la fecha siguiente, el "xeneize" vapuleó a Ferro por 6-2 y logró su 9na victoria consecutiva.
En la 30ma fecha se produjo un nuevo triunfo de San Lorenzo como visitante ante el puntero Boca. Con el correr de los años se demostró la supremacía azulgrana en ese reducto. Independiente no aprovecho la caída, ya que igualó con Gimnasia LP, por lo que el líder mantuvo su diferencia de 2 puntos. Sin embargo, el domingo siguiente, tras una nueva derrota del "rojo" de Avellaneda, el conjunto boquense pudo estirar aún más la ventaja gracias a su victoria contra Talleres RE-Lanús por 3-1. De esta manera, el conjunto de Cherro, aventajó a Independiente, San Lorenzo y River por 4 unidades.

San Lorenzo 5-3 Boca. Una de las postales de los encuentros durante la temporada '34.

La 32da fecha tuvo la particularidad de que se enfrentaron todos los rivales clásicos, sin embargo la recaudación no fue la esperada y tan sólo alcanzó $57.000. En la Boca, el líder derrotó a River por 2-0 y completó un histórico ciclo ante su clásico, demostrando la paternidad: Sobre 9 partidos disputados en el profesionalismo, triunfó en 6, con tan sólo 1 derrota. Esa tarde, como para que el regocijo boquense fuese total, le sacó 5 puntos a su escolta. Esa diferencia se amplió en la 35ta fecha, cuando Boca obtuvo 53 unidades y San Lorenzo, que desplazó a Independiente del segundo puesto, llegó a 47.

Cuando todo parecía cocinado, el triplete de Zozaya (centrodelantero de Estudiantes) ante el líder reavivó el campeonato. Boca cayó y San Lorenzo e Independiente sumaron. Además, una fecha después, Racing volvió a golpear al "xeneize" lo que le significó su segunda derrota consecutiva y el acercamiento de Independiente, que quedó a 3 puntos. Sin embargo, con esa diferencia y falta de dos fechas del final, Boca estaba a un paso de coronarse.

                                  Foto del campeón de 1934, con la particularidad de haber recibido ¡62 goles en contra!La penúltima jornada le permitió a Boca alcanzar su segundo título de manera profesional, tras batir a Platense por 5-1. La eficacia de su delantera fue ratificad. Sin embargo, el campeón cerró su campaña con una categórica derrota en Parque Patricios, donde Huracán lo venció por 5-2 con 4 goles de Masantonio.Fue paradójico que, no obstante haberse jugado los clásicos tres veces en lugar de dos, se haya producido una notable merma en la venta de entradas, lo cual indicó que el campeonato no despertó el mismo interés que años anteriores. La extensión del mismo de 34 a 39 fechas contribuyó a la disminución del interés. Otro factor importante lo constituyó el apreciable incremento en el precio de las entradas a partir de la 25ta fecha, unificado en $1,20.Así lo entendieron los dirigentes, que dispusieron volver al precio anterior. Además gravitó poderosamente en la declinación del interés general el hecho de que Boca obtuvo una amplia ventaja en la tercera rueda. Pese a que sumó los méritos necesarios para convertirse en un digno campeón, Boca Juniors distó de ser un equipo sensacional, como lo demuestra el elocuente hecho de haber recibido 62 goles en contra, cifra que quedó en la historia para reflejar a la defensa campeona más goleada.En definitiva, el torneo de 1934 no dejó una experiencia provechosa, como lo admitieron los dirigentes, volviendo al formato anterior. Nuevamente dos ruedas, el retorno de Quilmes y Tigre y deshacer las absurdas uniones de cuatro clubes que no aportaron ni la más mínima utilidad.

Historia del fútbol argentino - 1934 - Segunda vuelta

Un resultado, en cierto modo sorpresivo, fue el que se produjo en la cancha de Independiente cuando Racing venció al local por 3-1 en la 15ta fecha. Por su parte, Vélez y Boca igualaron en Villa Luro, dejando en las posiciones a Independiente 1° con 21 puntos, a Boca y Vélez con 20 y a River y San Lorenzo con 19.
En la 17ma jornada, Independiente se impuso ante River por 1-0 y confirmó su condición de líder, aprovechando la espectacular victoria de San Lorenzo ante Boca por 5-3, que lo llevó al segundo puesto a 2 unidades del puntero. Sin embargo, el "ciclón" alcanzó la punta en la fecha 21, gracias a la victoria de Chacarita sobre Independiente por 2-0.

Pese a estar puntero casi dos ruedas, Independiente convirtió pocos goles. De pie: Ferrou, Lecea, Corazzo, De Jonge, Bello y Renganeschi. Agachados: Valentini, Ibáñez, Erico, Sastre y Castillo

A diferencia del campeonato anterior, en el que Gimnasia LP fue el único puntero la mayor parte del tiempo, en 1934 hubo una lucha más pareja y reñida, lo que contribuyó a que las recaudaciones se elevaran considerablemente. Aunque no pasó mucho tiempo para que se modificara esa situación de bonanza.
El enfrentamiento entre los dos punteros en la jornada 22, acaparó el mayor interés. Se registró un empate en dos, por lo que Independiente y San Lorenzo siguieron compartiendo la punta, situación que se mantuvo hasta el domingo siguiente. Pero 7 días más tarde, San Lorenzo cayó ante Platense e Independiente, que venció al fusionado Talleres RE- Lanús, recuperó la punta.

Foto del encuentro entre cuervos y diablos por la fecha 22, que terminó en empate en dos.

Por la 25ta fecha, River recibió a Boca en momentos en que el conjunto de Núñez comenzó a sentir una sensible declinación, demostrado en el marcador, tras caer 1-0. Una semana después el "xeneize" llegó al primer puesto gracias a la derrota del "rojo" en La Plata, frente a Estudiantes. De esa manera, Boca sumó 38 puntos, Independiente 37 y más lejos San Lorenzo y River con 32.

Historia del fútbol argentino - 1934 - Nuevas estructuras

En 1934, los dirigentes realizaron una innovación poco feliz en el torneo, al hacer disputar 3 ruedas con el propósito de aumentar el número de encuentros entre los rivales clásicos.

Con un autoritarismo censurable, los dirigentes de los clubes más poderosos decidieron reestructurar el campeonato mediante la eliminación de Quilmes y Tigre, por el mero hecho de haber tenido bajas recaudaciones en el certamen anterior, y ante la fusión de Talleres RE con Lanús y de Atlanta con Argentinos Juniors, estableciendo, además, la realización de 3 ruedas.

En este torneo se registraron dos incorporaciones importantísimas para Boca e Independiente. Por muy poco dinero, el "xeneize" incorporó a Ernesto Lazzatti, mientras que el "rojo" contrató a Arsenio Erico. Ambos jugadores defendieron sus camisetas de manera destacada.
El conjunto de la ribera también adquirió a los zagueros brasileños Moisés y Bibí. San Lorenzo compró a Sebastián Gualco, arquero que mostró grandes cualidades, y también al zaguero Gilli, proveniente de Ferro. River obtuvo el pase del mediocampista Bruno Rodolfi, quien resultó muy útil para el equipo, aunque la mayor sorpresa la causó la contratación del puntero derecho Natalio Perinetti, que, con 34 años, abandonó la actividad poco después de llegar a la entidad de Núñez. Por su parte Racing incorporó a 3 jugadores para el mismo puesto: Vicente Pietracupa, Pedro Chalú y Manuel Dañil.

Boca vs Independiente. 7ma fecha

El certamen de 1934 se inició con una victoria espectacular de River Plate que, en la Avenida Alvear, derrotó al último campeón por 6-1. Gimnasia LP, del que se recordaba su notable campaña un año antes, logró un categórico triunfo ante Ferro por 8-2. En la 3era fecha se produjo el debut del juvenil volante Lazzatti en el conjunto boquense, que venció a Chacarita por 3-2.
Al disputarse la 7ma fecha, Boca recibió a Independiente en un partido que terminó igualado en dos. Pero el hecho destacado estuvo presente por el debut del paraguayo Arsenio Enrico, quien varias temporadas después se convirtió en el máximo goleador del fútbol argentino En Avellaneda, River apabulló a Racing por 4-0. La trascendencia de los dos encuentros motivó a que se registrara un nuevo récord de recaudación, siendo el total de $83.000.
En la 9na fecha, Boedo fue testigo de la victoria de Independiente ante San Lorenzo por 2-1. En muy poco tiempo, el "rojo" cosechó una gran cantidad de puntos al vencer como visitante a Racing, River y San Lorenzo, además de empatar con Boca.
Una jornada después, se rompieron todos los pronósticos. Gimnasia LP le ganó a Independiente como visitante, y Racing hizo lo propio frente a Boca por 3-0. Pese a la derrota, el "diablo" mantuvo el liderazgo con 16 puntos, escoltado por River con 15 y Vélez con 14. Recién en el 5to puesto, a 5 unidades, se encontraba Boca, que no tuvo un buen comienzo aunque a partir de esa derrota se recuperó notablemente.
En la 11ma fecha se disputó el clásico de La Plata, donde tuvo lugar un episodio controvertido, ya que Estudiantes se retiró de la cancha como consecuencia del disgusto que provocó a sus jugadores una decisión del árbitro, cuando sólo se habían jugado 15 minutos y ganaba 1-0.
El domingo siguiente, Boca goleó categóricamente a River por 4-1, mientras que Vélez en Villa Luro derrotó a Independiente por 2-1 y se sumó a la punta del campeonato.
Con los partidos de la 13era fecha terminó la primera rueda. Quedó Independiente como único líder tras vencer a Estudiantes y gracias al empate entre el "fortín" y el "globo".

jueves, 28 de mayo de 2020

Historia del fútbol argentino - 1933 - Estadísticas finales

En un torneo cargado de emociones, donde la punta se repartió varias veces, sin duda el arbitraje se llevó el papel estelar debido a su determinante tarea respecto a sus fallos.

Lo que pareció ser para Gimnasia LP primero y para Boca después, terminó siendo para San Lorenzo, ayudado por River. Racing, terminó silenciosamente tercero, mientras que Independiente sexto.


Gimnasia LP fue el equipo más goleador y Racing Club el menos goleado. Mientras que Quilmes tan solo convirtió 41 goles y Tigre recibió 96.


A pesar de no haber una buena campaña, se destaca el trabajo de los hombres de Remedios de Escalada, sumando entre Rojas y Troncoso 40 goles de los 61 convertidos.

Historia del fútbol argentino - 1933 - La coronación de San Lorenzo

La penúltima jornada volvió a producir variantes en los puestos de arriba, ya que mientras Boca derrotó a Lanús pro 3-1, San Lorenzo cayó frente a Independiente en Avellaneda por 1-0. Por lo tanto, el equipo "xeneize" recuperó el liderazgo con un punto de ventaja sobre San Lorenzo, lo que hizo pensar a la mayoría que sería el campeón.

Equipo de Boca Juniors de 1933. De pie: Nardini, Piaggio, Silveyra, Yustrich, Silenzi y Arico Suárez. Debajo: Corsetti, L. Sánchez, Varallo, Benítez Cáceres y Alberino

La última fecha del campeonato de 1933 quedó en el recuerdo del fútbol profesional argentino. Boca resignó su posibilidad al título y River, de alguna manera, salvó un año irregular.
Solo 3 minutos le bastaron a Bernabé Ferreyra para poner en ventaja al "millonario". Seguido al gol, la lesión de Basílico complicó las cosas para el local, que a pesar de estar arriba en el marcador, se quedó con un jugador menos. Sin embargo, Manuel Ferreira marcó el segundo gol a los 15 minutos, y mientras el líder caía, San Lorenzo le ganaba en Villa Crespo a Chacarita y hasta ese momento era el campeón.

Equipo del verdugo River Plate, que le impidió a Boca coronarse campeón en la última fecha. Parados: Bernabé Ferreyra, Bosio, Cuello, Dañil, Basílico y Santamaría. Hincados: Zatelli, LAgo, Malazzo, Peucella y Luna

En la segunda parte, si bien Boca pudo descontar, no logró superar la defensa adversaria en la que descolló Peucelle, en posición de zaguero. A pesar de todos los contratiempos, River venció por 3-1 y no sólo obtuvo la primera victoria en el clásico durante el profesionalismo, sino que le amargó la tarde y el año su eterno rival.
Por su parte, San Lorenzo mantuvo el resultado del primer tiempo y de forma inesperada se consagró campeón por primera vez del fútbol profesional.

Historia del fútbol argentino - 1933 - El arbitraje, perjudicial para la definición

Tras la 25ta jornada, Gimnasia mantenía dos puntos de ventaja sobre Boca, lo que adquirió una importancia extraordinaria el cotejo que ambos disputaron en La Boca. 

Pese a no contar con los aportes de Naón y Delovo (dos de los jugadores más destacados), el equipo de La Plata se puso en ventaja por 2-0 en el primer tiempo, aunque rápidamente descontó Benítez Cáceres para finalizar el período 1-2. Fue en el complemento donde se produjo una actuación parcial y condenable del árbitro De Dominicis, quien sancionó un penal inexistente en favor de Boca, que así pudo empatar el encuentro. Pocos minutos después Nardini marcó un gol en clara posición adelantada, que el juez convalidó pese a las protestas justificadas de los jugadores de Gimnasia.
Boca así consiguió una victoria objetada por todo el periodismo, que censuró al juez del partido, quien más tarde fue expulsado de la Asociación. Con este tan discutible triunfo, Boca alcanzó a su adversario en la cima con 37 puntos, mientras que San Lorenzo quedó tercero y expectante, con 36.

 La protesta de Gimnasia. El arquero Herrera, sentado, asiste impasible a la conversión de un gol de San Lorenzo

Otro gran encuentro fue el de la fecha 28, cuando en Boedo se enfrentaron San Lorenzo y Gimnasia, separados tan solo por un punto. Tras una primera parte sin goles, el segundo inició con polémicas, debido a una falta de un defensor del "ciclón" dentro del área, que para el árbitro Rojo Miró fue fuera de ella. Enseguida, el conjunto local se puso 2-0 pero la polémica continuó cuando Herrera, arquero platense, detuvo un remate que el juez sancionó gol al aducir que la pelota traspasó la línea del arco.
En modo de protesta, Gimnasia se sentó en el campo de juego y dejó el camino libre para que los futbolistas rivales marcaran 5 goles más. El árbitro, perturbado por la actitud inesperada y pasiva, decidió suspender el partido, que terminó con la posibilidad y con la moral del equipo de La Plata.

A partir de ese entonces la disputa por el título quedó centrada exclusivamente entre San Lorenzo y Boca. En la 31era fecha, el "xeneize" derrotó a Independiente 2-0 y obtuvo su décima victoria consecutiva y demostró el poderío que no consiguió durante la primera rueda.
En la antepenúltima fecha la atención se centró en el partido que disputaron los dos aspirantes al título en la Avenida La Plata. Ese día, otro nuevo récord avistó nuestro fútbol con una recaudación de $51.569 tras la venta de 45.441 entradas. Esa tarde el local se impuso por 2-0 y cortó la racha triunfal de Boca, además de conseguir el primer puesto en solitario por primera vez en el torneo.

Historia del fútbol argentino - 1933 - Gimnasia LP, protagonista

Antes del final de la primera rueda, pareció imposible poder bajar a Gimnasia LP del pedestal, entre otras razones porque los equipos más calificados padecían una notoria irregularidad. Un hecho impropio de esa época tan pródiga en goles, se produjo en la 15ta fecha, tras finalizar tres encuentros 0-0, lo que constituyó toda una novedad.

Con los partidos de la 17ma fecha finalizó la primera rueda, en la que Platense, que jugó de local en la cancha de Alvear y Tagle, derrotó al líder por 4-2. Como San Lorenzo le ganó, tras un arduo trabajo, a Chacarita por 1-0, logró ubicarse a tan sólo dos unidades del puntero. Al finalizar el primer tramo del campeonato, Gimnasia sumó 27 unidades escoltado por San Lorenzo con 25, Boca y River con 23 y más atrás Racing e Independiente con 22.


José María Minella, figura de Gimnasia LP

Los dirigentes de Gimnasia LP habían prometido a sus jugadores un premio en efectivo si ganaban la primera rueda. Alcanzada la hazaña, la promesa no se cumplió, por lo que los futbolistas se declararon en huelga y no se presentaron a jugar contra Estudiantes en el comienzo de la segunda vuelta. Rápidamente, la comisión directiva recurrió a los jugadores de reserva, quienes tuvireon un meritorio desempeño y aventajaron a su clásico rival por 1-0. El "lobo" no solo siguió en la vanguardia, sino que aumentó su ventaja en la tabla gracias al empate entre "cuervos" y "granates".
Los huelguistas volvieron a jugar el domingo siguiente, aunque sufrieron la tercera derrota de la temporada tras caer ante Vélez Sarsfield, que comenzó a rodear un velo de inexpugnabilidad a su estadio de Villa Luro. Esa tarde, San Lorenzo derrotó a River por 2-0 en la Aveninda La Plata, por lo que se colocó a tan solo un punto del conjunto platense.

En la 20ma fecha Gimnasia se rehabilitó al vencer 7-1 a Tigre. San Lorenzo cayó en Avellaneda ante Racing, motivo por el cual el conjunto de La Plata volvió a aumentar su ventaja a 3 puntos.
A esa altura del certamen fue notoria la irregularidad de la mayoría de los equipos y hasta el "tripero" pareció menos firme. Una muestra de esto fue el partido que le ganó el modesto Argentinos Juniors por 2-1 en la cancha de la avenida San Martín. Sin embargo, también cayó San Lorenzo en su estadio ante Huracán por 4-1, motivo por el cual Gimnasia mantuvo su diferencia de 3 puntos, aunque Racing y River también se sumaron como escoltas.
Las jornadas siguientes no modificaron la posición de quienes marcharon en la vanguardia; el puntero mantuvo su diferencia, aunque reducida a 2 puntos tras su derrota frente a Atlanta en Villa Crespo.
La novedad fue que Boca se colocó segundo y reaccionó de manera tal que lo convirtió en uno de los principales protagonistas de las jornadas finales.

Historia del fútbol argentino - 1933 - El momento de los cañoneros

Con el fresco recuerdo de lo sucedido un año antes por el gran rendimiento de Bernabé Ferreyra, varios clubes incorporaron centrodelanteros para emular el trabajo del artillero de Rufino.

Independiente adquirió a Hugo Lammana, efectivo forward de Talleres RE. Racing obtuvo el pase de Evaristo Barrera, quién llegó desde Rosario, además de tres delanteros provenientes de Quilmes: Conidares, Zito y Leoncio. San Lorenzo contrató al brasileño Petronilo. River volvió a hacerse notar tras pagar $32.000 a Talleres RE por el arquero internacional Ángel Bosio, y fechas más tarde incorporó a Manuel Ferreira, brillante atacante proveniente de Estudiantes LP. También Vélez Sarsfield contrató al centrodelantero Agustín Cosso, quién no obstante jugó varias veces de defensor. Además, incorporó al chileno Iván Mayo, quién se destacó notablemente en el fútbol argentino. Por su parte, Boca contrató al volante central brasileño Martim Silveyra.

Cañoneros de la época

El campeonato de 1933 se inició a mediados de marzo, con un atrayente programa que produjo un nuevo récord para el fútbol nativo al recaudarse un poco más de $72.000, cifra que resultó inalcanzable para la época amateur.
Esa tarde en Avellaneda se encontraron los dos protagonistas de la final del año pasado, con triunfo para el local por 1-0 con gol del debutante Lamanna. En su estadio, Boca cayó derrotado ante Racing por el mismo resultado, mientras que el clásico de La Plata quedó para Gimnasia, que obtuvo una gran victoria de visitante, dando un anticipo del buen andar que tendría en ese certamen.
En la 2da fecha se registró un resultado sorprendente, ya que en la Avenida Alvear River goleó a San Lorenzo por 7-1. Lo más destacable de la 3era jornada fue la gran victoria de Gimnasia LP como visitante sobre Tigre por 3-2, tras estar 0-2 en el marcador. Esa victoria le permitió quedar solo en el primer puesto, tras conseguir todos los puntos hasta el momento disputados.

Una de las características de este torneo fue la irregular actuación de los equipos más poderosos. Una muestra de ello se produjo en la 4ta fecha, tras perder Boca y River. Al mismo tiempo, Gimnasia se mantuvo sólido en la punta, tras vencer por 5-2 a Argentinos Juniors en el bosque, reducto donde se volvió invencible. En la 6ta jornada cortó su racha de victorias consecutivas en Caballito tras igualar con Ferro, aunque no le impidió conservar el primer puesto.

Equipo de Gimnasia LP, sensación y animador del torneo de 1933

Su campaña tan lúcida y regular, comandada por José María Minella, además de los altibajos sufridos por los "grandes", le permitió al "lobo" llegar a la 8va fecha con una extraordinaria ventaja de 4 puntos sobre Independiente y San Lorenzo, quienes ocupaban el segundo puesto. Esa brillante campaña tuvo una rotunda confirmación en la 9na fecha, cuando Gimnasia venció en La Plata a Boca por 5-2.
Cada fecha que pasó lo hizo más fuerte y lo mantuvo firme en la cima. Pocos adjudicaron esa posición como una situación fortuita, ya que la realidad fue su gran andar se produjo por el ensamble de sus líneas y de la efectividad de su ataque.

Recién pasadas 9 magníficas fechas, Gimnasia resignó su condición de invicto tras caer ante Independiente en Avellaneda por 2-1. San Lorenzo, quién era el segundo, aprovechó su derrota y se colocó a 3 unidades del líder, precisamente en vísperas del enfrentamiento entre ambos equipos en la ciudad de las diagonales.
Sin embargo, el "lobo" tuvo otros planes esa tarde. Venció al "ciclón" por 4-2 y lideró esa parte del torneo con 19 puntos, aventajando a Independiente por 4, a Boca, River y San Lorenzo por 5 y Racing por 6.

Tras empatar en tres goles contra Lanús de visitante, el cuadro de La Plata volvió al bosque para jugar contra River, al que derrotó por 2-1. La reiteración de victorias del "tripero" frente a los conjuntos más poderosos, especialmente en su cancha, evidenciaron un poderío estimable, que se había insinuado en la segunda rueda del campeonato anterior.

miércoles, 27 de mayo de 2020

Historia del fútbol argentino - 1932 - ¿Qué más ocurrió ese año?

Cuando River Plate disfrutaba de una campaña sensacional al amparo de los goles de Bernabé Ferrayra, Carlos Peucelle llevó al club a su amigo Félix Roldán, quien se hizo cargo de las divisiones inferiores. Roldán, hermano de Belisario, el célebre autor de "el rosal de las ruinas", tuvo la vocación por descubrir y formar jugadores, pasión que compartía con Peucelle.
Del semillero de Félix Roldán surgieron futbolistas de una calidad excepcional, propios de una escuela que resultaría insuperable con el paso del tiempo.

Stanley Mattheus, el jugador más longevo que se retiró a los 50 años.

Los problemas en 1932 no fueron escasos. Uno se produjo cuando el partido de Lanús e Independiente fue suspendido como consecuencia de las airadas protestas que originó la sanción de un penal en favor del "rojo", que a posteriori fue declarado ganador.
Otro hecho lamentable ocurrió en La Boca, con el partido del local y Estudiantes por la 25ta fecha. Cuando el visitante convirtió el segundo gol del encuentro, el estupor del público boquense apareció manifestado en el campo de juego por un menor de 12 años, que con un zapato agredió al árbitro Riestra, culpándolo por la derrota de su equipo.



Otro de los males que arrastró el fútbol profesional de la época fue la multiplicación de cambios en los equipos. Atlanta, que en 1932 produjo el caso extraordinario de contratar un plantel completo de futbolistas paraguayos sin que se elevara la potencialidad del conjunto, utilizó en las 34 fechas del torneo la excepcional cantidad de 60 jugadores, cifra que estableció un récord no superado.

Historia del fútbol argentino - 1932 - River, campeón en el desempate

La última fecha estuvo rodeada de una intensa emoción. Independiente recibió a Racing, con la chance de salir campeón de local y contra su clásico rival, y River visitó a San Lorenzo, con la esperanza de ganar y aún seguir con chances de campeonar.
El clásico de Avellaneda comenzó 20 minutos antes que el cotejo que se jugó en Boedo, algo que por aquella época era muy común. Racing se puso rápidamente en ventaja y la noticia llegó a Boedo, donde San Lorenzo también marcó un gol, de modo que al terminar los primeros tiempos ambos aspirantes al título se fueron a los vestuarios derrotados.
Y mientras Independiente no pudo superar a la sólida defensa de Racing, River consiguió empatar faltando pocos minutos para terminar su partido. Con ese punto, logró alcanzar a Independiente en el 1° puesto.

La definición del torneo tuvo polémica, ya que se dispuso jugar el desempate el domingo siguiente. Independiente pidió la postergación del mismo, ya que tenía jugadores en malas condiciones físicas desde aquel famoso partido con Quilmes, pero River no accedió y finalmente el partido se jugó, una semana después, en la cancha de San Lorenzo. Con autoridad River derrotó a Independiente por 3-0 y se coronó por primera vez como campeón profesional del fútbol argentino, en un torneo donde fechas antes, pareció imposible que no tuviese al conjunto de Avellaneda como primero.


Se convirtieron 1.089 goles

La temporada de 1932 marcó de manera elocuente la atracción cada vez mayor del fútbol. El aumento de la capacidad de varios estadios fue una evidencia de popularidad en creciente desarrollo y fue notable la influencia de Bernabé Ferreyra, convertido desde ese entonces y por varias décadas en el jugador más renombrado.
Sin embargo, la organización daba muestras de ser deficiente en muchos casos; el diferente horario del comienzo de los partidos fue uno de los males que tardaría en erradicarse.
La calidad de los equipos participantes no fue excepcional. Si River parecía al principio invencible, ya se vio en qué importante proporción declinó. Independiente tuvo altibajos, aunque su defección en las jornadas finales, cuando pareció el seguro campeón, debe atribuirse a lesiones intencionalmente provocadas a Seoane y a Ravaschino, dos jugadores fundamentales.
Sin duda, 1932 no fue el mejor momento del fútbol argentino, por más que el fervor del público se multiplicara por la aparición de un jugador electrizante.

Historia del fútbol argentino - 1932 - Segunda rueda para el infarto

En la segunda etapa River, que había terminado 1°, fue de más a menos. Derrotó a Chacarita por 3-2 en un cotejo que perdía 0-2. Sin embargo, en la 22da fecha comenzó su declive tras perder ante Ferro en su cancha, ratificando el mal momento que atravesó durante ese período del campeonato perdiendo partidos accesibles y hasta la punta del torneo.
Independiente derrotó por segunda vez en la temporada a Boca, momento en el que el conjunto de Avellaneda ascendió en su juego y en la tabla de posiciones.

En la fecha 28 se jugó un partido de trascendental influencia en el desarrollo del torneo y su posterior definición. Quilmes le ganó, en un partido inmoral, 3-1 a Independiente, quien llevaba 6 puntos de ventaja y se perfilaba como campeón. Parte de la definición del torneo se debió a que River Plate, en ese entonces perseguidor del conjunto de Avellaneda, incentivó a los jugadores sureños de manera maliciosa. El uruguayo Adolfo Rodríguez, de Quilmes, lesionó intencionalmente a los delanteros de Independiente Seoane y Ravaschino, quienes eran los jugadores fundamentales del equipo, dejando al "rojo" en inferioridad física para desempeñarse en el resto del certamen.
Cabe recordar que en ese entonces, solo jugaban 11 jugadores y no había suplentes, por lo que una suspensión o lesión, ponía en desventaja al equipo afectado. Así fue como Independiente tuvo que afrontar el resto del torneo, de manera disminuía, disputando las fechas finales contra un River arrollador.
Carlos Peucelle, jugador del "millonario", fue indirectamente beneficiado en este acto inmoral, pero muchos años después confesó la indignación que le causó ver a los jugadores de Quilmes en la sede social de la entidad de Núñez, la semana siguiente al partido. Asimismo, Arsenio López, que en esa ocasión fue el arquero de Quilmes, reconoció en 1975 que él y sus compañeros recibieron un premio de los dirigentes de River por vencer a Independiente.
La inmoralidad presidía muy frecuentemente con la conducta de muchos dirigentes del fútbol por esa malsana pretensión de alcanzar el triunfo apelando a menudo a los medios más condenables.

Equipo de Independiente en 1932. Igualó en el primer puesto con River Plate, pero luego perdió la final por el campeonato. Arriba: Ferrou, Corazzo, Fazio, Maccarrone, Lecea y Almiñana. Abajo: Porta, Sastre, Seoane, Ramos y Betinotti

Por la misma fecha, Racing venció a Talleres RE por 3-2 y así alcanzó la punta del campeonato compartiéndola con Independiente y aventajando a River por 3 puntos.
Luego del escándalo, en la jornada 29, River y Racing se enfrentaron en la avenida Alvear. El local ganó 1-0 como en la rueda inicial, con otro gol de Bernabé Ferreyra. Debido a este resultado, Independiente quedó como único líder con 47 unidades, escoltado a River y Racing con 44.
En la 30ma fecha Independiente perdió inesperadamente contra Gimnasia LP en su estadio, que realizó una segunda rueda excelente, siendo tan solo un aviso de lo que hizo en 1933. Por esta derrota del puntero, River aprovechó y ganó su encuentro, quedando a tan solo 1 punto.

El campeonato de Independiente pareció un hecho, sobre todo cuando en la antepenúltima fecha, Boca derrotó a River por 2-1 con goles del paraguayo Benítez Cáseres, quien luego se convirtió en ídolo "xeneize".
El "rojo" se impuso por el mismo resultado ante Talleres RE, y a falta de dos fechas para el final, estiró su ventaja a 3 puntos sobre "millonarios" y "académicos". Tuvo en sus manos la definición del torneo, ya que en los dos últimos partidos tuvo que jugar contra sus escoltas.


Boca Juniors en 1932, verdugo de River. De Pie: Moreyras, Plaggio, Narvaja, Yustrich, González y Arico Sánchez. Hincados: Penella, Varallo, L. Sánchez, Kuko y Alberino // Benítez Cáceres, delantero paraguayo que arribó a Boca en 1932

River recibió a Independiente en la penúltima fecha, con el recuerdo de lo que ocurrió en la primera rueda (5-0 a favor del conjunto de Avellaneda). Por tal motivo, tuvo un sabor especial esta victoria millonaria por 6-1.
Mientras que en la cancha de San Lorenzo, Boca, que no tuvo un buen año aunque fue el conjunto que más puntos obtuvo en los desquites, venció a Racing por 1-0 y le quitó las posibilidades de quedar como puntero y de pelear por el campeonato.
A falta de tan solo una fecha para la finalización del segundo torneo profesional, Independiente mantuvo el liderazgo con 1 punto de ventaja sobre River, mientras que Racing perdió todas sus posibilidades en manos de Boca.

Historia del fútbol argentino - 1932 - ¡Es el equipo de Bernabé!

El campeonato de 1932 quedó grabado a fuego en el recuerdo por la sensacional aparición de Bernabé Ferreyra, un goleador excepcional. Y al influjo de sus goles espectaculares creció la popularidad de River y del fútbol, por lo que fue necesario agrandar la capacidad de los estadios ante el enorme aumento del público.

Bernabé Ferreyra, goleador de River Plate en 1932.

El certamen, que tuvo alternativas cambiantes, terminó igualado entre River e Independiente, por lo que se jugó un partido adicional al que el cuadro de Avellaneda llegó disminuido por un acto inmoral. De tal manera, "la banda" lo venció por 3-0 y se coronó campeón por primera vez en el fútbol profesional.

La colocación de tableros indicadores de los resultados de todos los partidos en las diferentes canchas fue un notable acierto que agregó un ingrediente extra al fabuloso espectáculo. Pocas temporadas quedaron marcadas en la historia del fútbol como la de 1932, porque la popularidad de ese deporte estuvo en constante alza. A esto contribuyó de modo esencial la aparición de un goleador formidable como Bernabé Ferreyra, quien el año anterior en Tigre, ya había dado noticias de sus aptitudes. A la espectacularidad de la mayoría de sus goles, convertidos con remates de inusitada potencia, se unió el hecho extraordinario de que los marcara sucesivamente en cada uno de los primeros 12 partidos que jugó su equipo, como si estuviera dotado de una infabilidad suprema.
De esta manera, se consideró a los delanteros de la época como "cañoneros".

Tabla de goleadores liderada por Bernabé Ferreyra, quien se convirtió en el jugador que más goles marcó en un torneo profesional.


El trabajo de Bernabé Ferreyra fue tan bueno, que el diario Crítica instituyó un premio consistente en una medalla de oro para aquel arquero al que el goleador riverplatense no le hiciera un gol. El premio se lo llevaron tan solo dos futbolistas: El arquero de Independiente Sangiovanni, tras la goleada de su equipo por 5-0, y el de Huracán De Nicola tras un suceso fortuito. El encuentro iba 0-0 hasta que se suspendió por falta de luz. Luego, se reanudó y se modificó el resultado, pero como hasta ese momento el delantero no había convertido, se le otorgó igualmente el premio.

Historia del fútbol argentino - 1932 - Nacen los millonarios

Tras el campeonato conseguido por su archirrival un año antes y ante la sequía de títulos, River apostó fuerte al '32 y decidió invertir 105.000 pesos para la compra de varios jugadores, causando conmoción en el fútbol argentino y adoptando el apodo "millonarios".

Fue el club que más compró y que más dinero gastó. De los casi 100.000 pesos, 35.000 se utilizaron para adquirir a su estrella Bernabé Ferreyra, quien luego se convertiría en el goleador del campeonato. Sin embargo, Boca también concretó varias incorporaciones de renombre, entre ellas las del arquero Yustrich, aunque la más resonante fue la del paraguayo Delfín Benítez Cáceres, el mejor futbolista de ese país que jugó en nuestras canchas. Independiente contrató al vasco Lecea, de Rosario, y al uruguayo Almiñana, con lo que completó el mediocampo con todos jugadores uruguayos.
Al igual que el año anterior, aparecieron varios cordobeses. Montañez en Gimnasia LP, Poletto y Benavídez en Tigre, y Bravo e Infante en Ferro, donde ya estaba el zaguero Gilli. Además, llegaron los santiagueños Juárez, López Bravo y Barraza a Chacarita y Luna a Argentinos Juniors, en tanto que los bahienses Troncoso y Romano se incorporaron a Talleres RE.
El fútbol provinciano comenzó a hacer un aporte valioso al campeonato principal. Así fue como Rosario se convirtió en la ciudad que más jugadores brillantes produjo.


River Plate campeón de 1932. Arriba: Malazzo, Dañil, Sirni, Bernabé Ferreyra, Basílico y Santamaría. Abajo: Zatelli, Lago, Cuello, Peucelle y Luna

El campeonato comenzó el 13 de marzo de 1932, fecha en la que otros años de la época amateur, no había terminado el torneo del año anterior. River, que fue gran animador del torneo, venció a Chacarita con 2 goles de Ferreyra. Ese momento, comenzó a edificarse una popularidad que fue en crecimiento.En la 3era fecha se registró un buen triunfo de Independiente en la Boca, mientras que el "millonario" le ganó 2-1 a Argentinos Juniors en La Paternal con más dificultad de lo previsto y con el infaltable gol de Bernabé. Al imponerse por 5-2 ante Estudiantes en la 4ta jornada, River quedó como único líder con un punto de ventaja sobre Racing, que consiguió en ese campeonato la valla menos vencida. El comienzo del último campeón fue desconcertante, ya que en las primeras 5 fechas, solo obtuvo 3 puntos.

A medida que avanzó el campeonato, aumentó la expectativa por ver jugar a River y especialmente a su figura, quien marcaba goles todos los partidos. En la 8va fecha el "millonario" derrotó a Gimnasia LP y consiguió 8 triunfos consecutivos, por lo que además de liderar en solitario le sacó 2 puntos de ventaja a Racing. El equipo parecía imbatible, sin embargo en la 9na jornada Vélez Sarfield cortó esa racha estupenda en Villa Luro, con un estadio a pleno que debió ser ampliado según lo exigía el continuo incremento de espectadores. A pesar del primer tropezón, rápidamente se repuso la semana siguiente tras vencer a Talleres RE por 3-0, con un nuevo gol de Bernabé y luego tras ganarle 4-3 a Lanús en un duelo muy parejo, donde Rufino convirtió 3 tantos.

Racing Club en 1932. Fiel perseguidor del luego campeón River Plate. De pie: Stagnaro, Pompey, Bottaso, Scarcella, Garrafa y Dellatorre. Debajo: Barralía, Bugueyro, Fassora, Del Giudice y Perinetti

En la 12va fecha se cruzaron en Avellaneda Racing y River, separados solo por dos puntos en los primeros puestos del torneo y generando una expectativa enorme para el torneo. Bernabé ya había dejado su huella en las primeras 11 fechas y su club necesitaba de él para estirar la ventaja respecto de su perseguidor.
Varias horas antes de arrancar el encuentro, el estadio ya estaba colmado por una multitud impresionante. Ese día el local vendió las 40.000 entradas disponibles y la recaudación se convirtió nuevamente en récord (35.000 pesos). El partido estuvo igualado hasta los 37 minutos de la parte final, cuando Ferreyra, con un espectacular remate desde 40 metros, convirtió el gol con el que River ganó el partido por 1-0. Con esa victoria, le sacó aún más diferencia en la tabla de posiciones, estirando a 4 la ventaja.

Pareció, por algún tiempo, que el problema de los arbitrajes se había superado. Pero en la 14ta fecha, tres jueces fueron agredidos y un cuarto escapó milagrosamente de la furia de los hinchas en la cancha de Lanús. Esa jornada River goleó 3-0 a Atlanta en la cancha de San Lorenzo, equipo que hizo debutar a 9 jugadores paraguayos aunque no ayudaron a mejorar la pobre campaña del equipo de Villa Crespo.
En la siguiente jornada, el clásico entre Boca y River terminó igualado en uno. Para el visitante, el infaltable gol de Bernabé.

martes, 26 de mayo de 2020

Historia del fútbol argentino - 1931 - Datos del torneo

El primer torneo profesional dejó algunos datos importantes para resaltar.

Juan Tellería jugó de defensor en Platense entre los años 1927 y 1930 aunque en el primer equipo disputó tan solo un encuentro. Ese, fue el recordado enfrentamiento entre "calamares" y "funebreros" el 6 de diciembre de 1931.
En aquella época, gestos como el de Tellería eran más comunes de esperarse, todo lo contrario a lo que hoy se podría imaginar, donde ganar es lo único que importa. La situación se dio cuando un remate de Díaz, puntero del visitante, fue desviado por el arquero local Gualco. El árbitro cobró córner, al tiempo que el jugador de Chacarita le resaltó al de Platense, quien era su amigo, que la pelota había ingresado al arco y que, debido a que la red estaba rota, la pelota se había ido por fuera simulando un no gol. El jugador "calamar", sin protestar, se lo hizo notar al juez del partido, quien finalmente concedió el gol, el cual significó la victoria para el conjunto de San Martín.
Tellería luego se recibió de médico y llegó a ser dirigente de Platense, aunque nunca más jugó en primera división del club. Sin embargo, su gesto heroico le bastó para quedar en la historia.

Durante el campeonato de 1931 únicamente 10 jugadores tuvieron asistencia perfecta: Ramón Mutis y Antonio Alberino de Boca Juniors; Máximo Federici de Huracán; Diego García y José H. Fossa de San Lorenzo de Almagro; Enrique Guaita de Estudiantes LP; Emilio Méndez y Luis Pardiez de Argentinos Juniors; José Ravizza de Talleres RE y Juan Martínez de Quilmes.

Juan Arrillaga, jugador de Quilmes, primero en marcar 5 goles en un partido. Fue en la victoria frente a Gimnasia LP por 6-0

En un primer torneo donde se marcaron casi 1.100 goles, aquí la tabla de goleadores


El hecho más insólito del torneo ocurrió en la segunda fecha cuando Racing goleó a Platense por 5-1. Natalio Perinetti, capitán del conjunto de Avellaneda, expulsó a su propio compañero, Pompey, luego de un incidente entre ellos. Nunca se supo si la comisión directiva tomó alguna medida disciplinaria contra el marginado, pero lo que si ocurrió fue la ausencia de éste en la siguiente jornada, volviendo recién quince días más tarde.

Historia del fútbol argentino - 1931 - Boca Juniors, primer campeón de la nueva era

La rueda de los desquites se inició con una goleada sensacional de Racing a Independiente, en el que fue el primer enfrentamiento de los rivales de Avellaneda en el profesionalismo. El cuadro blanquiceleste ganó por 7-4, lo que es récord insuperable de goles en partidos entre los denominados "grandes".
En la 19na jornada, River, de campaña irregular, venció a Estudiantes por 3-2, siendo esta la primera derrota del conjunto de La Plata en su estadio. Chacarita, con la valiosa incorporación de los hermanos salteños Luis y Marcos Díaz y Coria, logró ocho victorias consecutivas. Algunas de sus víctimas fueron Estudiantes, Boca y River. El modesto equipo de Talleres RE también tuvo una fugaz, pero elogiable racha, al empatar sucesivamente contra Estudiantes y River, y tras vencer a San Lorenzo, como si se hubiese puesto a actuar a favor de las pretensiones de Boca.

En la 21va fecha Boca empató en su cancha 3-3 contra Ferro, pero a pesar del resultado mantuvo los 3 puntos de ventaja sobre River, quien era el segundo. En esa jornada se produjo un triunfo histórico de Gimnasia ante Estudiantes por 3-2. La calificación deriva del hecho especial de que hacía 15 años el "lobo" no vencía al "pincha". Los partidos de la 24va fecha tuvieron la virtud de clarificar las posibilidades de los equipos que aspiraban al título. Boca venció a Tigre por 3-2 y aumentó su ventaja sobre ante Estudiantes y River, quienes cayeron derrotados. El "xeneize" acumuló 37 unidades hasta ese entonces contra las 31 de sus perseguidores.
Esta consolidación de Boca en la punta, restó interés al campeonato. Solo sopló una brisa de emoción cuando Estudiantes se aproximó al líder, que perdió con Racing en su cancha. Sin embargo, el equipo de Cherro se mantuvo cómodamente en el primer puesto y en las jornadas siguientes volvió a tener 5 puntos de ventaja sobre el "pincha", que a su vez se afirmó como escolta tras las derrotas de San Lorenzo y River.

Boca Juniors, campeón de 1931. De pie: J. Evaristo, Bidoglio, Fosatti, Mutis, Silenzi y Arico Suárez- Debajo: Nardini, Tarascone, Varallo, Cherro y Alberino

Solo hacia el final del campeonato se estrecharon las posiciones, ya que Estudiantes superó a Boca por 4-1 en la 32va, siendo esta una jornada infortunada para Bidoglio, que al sufrir una fractura de una pierna, debió ponerle fin a su brillante campaña. Con esta victoria, el "pincha" se ubicó a sólo dos puntos de "xeneize", lo que dio un especial interés a las dos últimas fechas. Pero, sorprendentemente, el conjunto de La Plata cayó frente a Atlanta, quien ocupaba el último lugar de la tabla, y al ganarle Boca por 4-0 a Talleres RE, se coronó como primer campeón profesional, título que ratificó de visitante, tras golear a su clásico rival por 3-0.

El primer campeonato profesional mejoró en algunos aspectos el panorama futbolístico. La agrupación de las entidades más populares y el mayor ordenamiento del torneo fueron motivos de poderosa influencia para que el público aumentara considerablemente.
Sin embargo, también tuvo hechos negativos y errores que tardaron en subsanarse. Uno de ellos fue la frecuencia de cambios que se introdujeron en casi todos los equipos, lo que no podía reanudar una mayor armonía y belleza del juego. Además, no hubo cierre de lo que hoy se conoce como libro de pases, por lo cual los clubes siguieron incorporaron jugadores a lo largo de todo el campeonato.
Pero el problema principal fueron los árbitros, que se mantuvo durante mucho tiempo en nuestro fútbol.


Se convirtieron 1.099 goles

Historia del fútbol argentino - 1931 - Puntapié inicial

La expectativa suscitada por el primer campeonato que se realizó a partir de las reformas estructurales quedó testimoniada muy pronto por el creciente número de espectadores.

Porta y Ravaschino festejan el empate de Independiente frente a San Lorenzo en Boedo

El 31 de mayo de 1931, fecha en la que comenzaría el campeonato, terminó siendo un día desapacible, lo que obligó a suspender el clásico de Avellaneda, que solo se jugaría en enero del año siguiente. Pese al mal tiempo el público creció en relación a certámenes anteriores y pronto ese incremento se manifestó de manera notoria. 
Debido a que el torneo comenzó casi a mitad de año, obligó a que varias jornadas se jugaran entre semana. Un acontecimiento importante se produjo en la cuarta fecha, cuando La Plata logró la mayor recaudación (13.161 pesos) tras el clásico entre Estudiantes y Gimnasia. En la quinta fecha se recaudó, gracias a nueve encuentros, 54.444 pesos, lo que constituyó un nuevo récord y demostró el creciente interés del público.
El "pincha" se convirtió desde el principio en uno de los animadores del certamen y se destacó por la gran eficacia de su delantera, que en los primeros ocho encuentros convirtió 28 goles. Esto le permitió encabezar las posiciones, seguido por Boca. Sin embargo, con el correr de las fechas se volvió irregular, lo que conspiró contra su chance, ya que perdió partidos contra equipos modestos, como por ejemplo Tigre en la 9na fecha.
La lucha por los primeros puestos se mantuvo reñida y luego de once fechas, Boca lideró con 18 puntos, seguido de Estudiantes y San Lorenzo con 17 y River con 15. Racing, por su parte, era el colista del torneo, aunque luego reaccionó.

Foto de la delantera "pincharrata" de 1931. Lauri, Scopelli, Zozaya, Ferreira y Guaita


El primer escándalo de nuestro fútbol profesional lo produjo Racing, que tras enfrentarse a Estudiantes en Avellaneda, obligó a suspender el encuentro. Los simpatizantes del local, fúricos por un fallo arbitral, invadieron el campo y protestaron de manera abrupta, acto que, días más tarde de la suspensión, le otorgó el triunfo al conjunto platense.
Los fallos arbitrales fueron enérgicamente protestados por el público, jugadores y dirigentes, dando un mal ejemplo sobre la falta de acatamiento a la autoridad. Y sin respaldo directriz, la tarea de los jueces se volvió deficiente y penosa, inclinados a cobrar favorablemente para los equipos más poderosos.

El enfrentamiento entre Boca y San Lorenzo provocó una enorme expectativa por la ubicación que ostentaban (1° y 2°). La recaudación de 30.510 pesos fue la mayor del campeonato. En esa fecha, el torneo recaudó 63.681 pesos, lo que se convirtió en un nuevo récord para el fútbol argentino. El conjunto de Boedo venció por 2-0 y comenzó, aunque sin sospechas, lo que luego se afianzó, la paternidad sobre el "xeneize". Dos jornadas después, Boca recibió a Estudiantes en lo que fue otro gran partido que terminó igualado en dos.

Partido entre Boca Juniors y San Lorenzo de Almagro. El arquero "xeneize" Fossatti detiene un remate. Encuentro con la mayor recaudación

El clásico más importante de Argentina tuvo origen de manera profesional por primera vez en La Boca al terminar la primera rueda, aunque el encuentro no pudo concluir. La sanción de un penal a favor del local, cuando perdía 1-0, fue airadamente protestada por los jugadores de River. Luego de su ejecución, lo que provocó el empate, los futbolistas visitantes reiteraron sus protestas, por lo que tres de ellos fueron expulsados, además del desacato de la autoridad, lo que le llevó al juez a suspender el partido. Días después, por los hechos ocurridos, el Tribunal de la Liga le dio el partido ganado a Boca.
Al terminar la primera rueda, Boca lideró con 27 unidades, seguido de Estudiantes y San Lorenzo a un punto.

Historia del fútbol argentino - 1931 - Primer campeonato profesional

El advenimiento del juego rentado, en 1931, tras la tercera escisión del fútbol argentino, determinó profundos y saludables cambios en su estructura organizativa. Simultáneamente, emergieron vicios derivados de la lucha de intereses y de la falta de personalidad de los árbitros, desprovistos del respaldo de los dirigentes. Se registró una significativa depuración de participantes de escaso poderío económico y pobre rendimiento deportivo.


Incidentes. El primero en el primer superclásico profesional, luego de que la policía ingresara al campo de juego para calmar a los jugadores de River Plate, enojados luego de la sanción de penal a favor de Boca Juniors

Las bases poco sólidas que tuvo la unificación del fútbol argentino en 1927 desembocaron en la tercera escisión, que provocó la declaración del profesionalismo en 1931. Fue una decisión impostergable, ya que resultaba imposible seguir manteniendo un estado de cosas que originaba múltiples inconvenientes. La nueva era produjo beneficios rápidamente advertibles, como la gran depuración registrada con la desaparición de equipos de escasísimo poderío económico y deportivo. Además, mejoró ostensiblemente la organización de campeonatos, que de ahí en adelante fueron disputados dentro del año de su comienzo. Aunque también aumentó el interés en el juego y creció la inmoralidad entre los participantes.
La Liga Argentina de Football, que agrupó a los 18 clubes que disputaron el primer campeonato profesional, quedó desafiliada de la FIFA, motivo por el cual varios dirigentes contrataron a jugadores extranjeros sin el correspondiente pase. Así fue como Independiente trajo a los uruguayos Porta, Ferrou, Enrique Fernández (tras un breve paso por Talleres RE) y a Corazzo, excelente mediocampista. Racing no se quedó atrás y contrató al gran arquero Bottaso, mientras que Boca incorporó al valiosísimo delantero "pancho" Varallo, proveniente del "lobo", quien se convertiría en uno de los máximos goleadores de la historia de Boca. Por su parte, Estudiantes LP fichó a Uslenghi y Areco, y Gimnasia a Sosa, Dendi y Miguens.

Francisco Varallo, proveniente de Gimnasia LP, se convertiría en el máximo goleador de Boca Juniorshasta la llegada de Martín Palermo, y Carlos Peucelle, por quien River Plate abonó $10.000

Pero la contratación más resonante la realizó River, que pagó 10.000 pesos por Carlos Peucelle, otro jugador que justificó ampliamente su adquisición. La mayor parte del dinero fue a poder de Puecelle, quien cedió el resto al Club Sportivo Buenos Aires, del que procedía. El jugador adquirió una casa en Adrogué y un automóvil.
A partir de la 11ma fecha comenzó a aplicarse una modificación reglamentaria en relación con el saque lateral. Cuando un jugador hacía un saque de costado de forma incorrecta, el mismo le correspondía al otro equipo (hasta ese entonces, el lateral mal hecho era penado con un tiro libre para el equipo rival).

Al comenzar el profesionalismo, la cantidad de socios que tenía cada club era la siguiente:

En el torneo de 1931 se vendieron, hasta diciembre, 1.847.058 entradas, lo que da un promedio de 6.522 localidades por partido

Historia del fútbol argentino - 1938 - Mundial de Francia

Los dos primeros campeonatos mundiales constituyeron importantes éxitos económicos. Ello alentó notablemente a continuar con su realización,...