jueves, 4 de junio de 2020

Historia del fútbol argentino - 1938 - Mundial de Francia

Los dos primeros campeonatos mundiales constituyeron importantes éxitos económicos. Ello alentó notablemente a continuar con su realización, y para la tercera Copa del Mundo, que se desarrolló en Francia en 1938, se inscribieron 35 países, 3 más que en 1934.

La cantidad podría haber sido mayor si la Argentina hubiese tenido dirigentes dinámicos, emprendedores y, además, responsables. Entre los errores que cometieron los encargados de conducir el fútbol argentino se puede detallar: enviaron la inscripción fuera de término estipulado por los organizadores, y pese a que el Comité Ejecutivo por una deferencia especial la aceptó, inexplicablemente los dirigentes renunciaron al derecho de intervenir en la competencia. Además, a este Campeonato Mundial no pudo concurrir el seleccionado de España, porque ese país fue azotado, en esos momentos, por una cruenta guerra civil.

Francia 1938. Partido entre Italia y Hungría
Para este Mundial se dispuso que en caso de empate en la final, se realizara un nuevo cotejo y que, de subsistir la igualdad, ambos protagonistas serían designados ganadores. Decisión polémica en nuestros tiempos, pero honorífica en aquella época. En cambio, se mantuvo la reglamentación de eliminación directa ante la primera derrota.

Leónidas, el brillante delantero brasileño insólitamente reservado para un posible partido final

En la rueda preliminar se disputó un partido extraordinario en el que Brasil, uno de los favoritos a llevarse el título, derrotó a Polonia 6-5 en tiempo suplementario. Fueron figuras los delanteros Willimowski y Leónidas, de Polonia y Brasil respectivamente.
Italia comenzó con una victoria ante Noruega por 2-1.  El campeón de 1934. fue otro de los favoritos.
Francia, pese a su condición de local, no pareció estar a la altura de los preferidos de la mayoría de los aficionados del fútbol, si bien al debutar se impuso por 3-0 ante Bélgica. Esa presunción se confirmó a posteriori, cuando Italia dio cuenta del local tras ganarle 3-1. Los "galos" apenas jugaron 2 partidos antes de quedar eliminados.

Los capitanes antes de la final. El italiano Meazza y el húngaro Sarosi, junto al árbitro francés Capdeville

Para las semifinales se clasificaron Italia, Brasil. Suecia y Hungría. El 16 de junio se enfrentaron en Marsella, italianos y brasileños. Los sudamericanos, con una confianza inesperable, subestimaron al conjunto europeo, que no solo era el vigente campeón, sino también aspirante al título en juego. Por todo eso resultó, para el fútbol, inadmisible la decisión de Brasil de reservar para la final, que estaban seguros que iban a jugar, a su mejor jugador, Leónidas, máximo goleador del campeonato.
Esa confianza fue faltal para la "verdeamarela" quien cayó por 2-1. En la otra semifinal. Hungría se impuso a su rival por 5-1.
Los brasileños tuvieron su magro consuelo al vencer a Suecia por 4-2 en el tercer puesto, luego de estar en desventaja por 2 goles.

Formación italiana en el encuentro cumbre del Mundial de Francia 1938

El 19 de junio, en Colombes, los italianos lograron un categórico triunfo sobre los húngaros por 4-2, y se clasificaron campeones por segunda vez consecutiva. Curiosamente, en ambas conquistas, Italia tuvo dos ejes medios sudamericanos: En 1934 al argentino Monti y en 1938 al uruguayo Andreolo.
Lamentablemente, historia bien conocida, la Copa del Mundo paró un largo tiempo debido a la Segunda Guerra Mundial.

Italia, el campeón. En la final jugaron: Olivieri, Foni, Rava, Serantoni, Andreolo, Locatelli, Viavatti, Meazza, Piola, Ferrari y Colausi

Historia del fútbol argentino - 1938 - Estadísticas finales

Si la tabla de 1937 produjo sensaciones al convertirse más de 1.200 goles, la de 1938 se llevó puesta todos los récords.


Se convirtieron 1.334 goles

En este año, se registraron varios récords que no fueron superados. Independiente convirtió 115 goles, Racing marcó 24 en 3 juegos consecutivos. El encuentro entre River y San Lorenzo se transformó en el resultado más abultado de los clásicos. El promedio de gol por partido fue de casi 5. En la 4ta y 31era fecha se marcaron 56 goles, a razón de 7 partidos.
Nuevamente 3 equipos marcaron en el mismo certamen (y esta vez con dos fechas menos) más de 100 goles. Y también, otros 3 equipos recibieron 100 o más goles, lo cual establece un récord negativo único.


La lucha por el ascenso estuvo bastante reñida. Entre los 5 primeros, 4 puntos de diferencia e igualdad en el primer puesto. Los dos conjuntos quilmeños disputaron dos partidos para desempatar y saber quien lograría acceder a la Primera División. El "mate" se impuso en ambos encuentros por 1-0 y disputó, por primera vez, el torneo profesional de primera en 1939.

Por primera vez en el fútbol profesional, los primeros 15 artilleros convirtieron más de 20 goles.

Historia del fútbol argentino - 1938 - La consagración

Al comenzar los desquites se registró un hecho notable en la cancha de Tigre, donde el equipo local igualó ante Independiente. El curioso episodio consistió en que el partido terminó sin goles, caso que no había ocurrido en todo el campeonato de 1937 ni en la primera rueda del presente certamen. Lanús, de floja campaña, venció 3-2 a San Lorenzo; tras su valioso empate ante Independiente, el "funebrero" estuvo cerca de repetir la hazaña.

El verdadero acontecimiento de la 19na fecha fue el clásico enfrentamiento entre River y Boca. El tradicional partido, que se disputó en el nuevo gran estadio, finalizó igualado en dos y la produjo la mayor recaudación del certamen ($35.733). Esa tarde, debutó el arquero uruguayo Besuzzo.
En la 20ma jornada, Independiente venció a San Lorenzo por 2-0. Esa derrota, y el hecho de quedar libre en la siguiente fecha, retrasó al conjunto de Boedo. Así fue como Independiente, que venció a Almagro por 3-2, y River, que se impuso ante Estudiantes LP por 2-1, se distanciaron. El conjunto de Avellanada logró 31 puntos, mientras que River 30. Más lejos San Lorenzo con 26.

El equipo de Racing Club, que convirtió 24 goles en tres partidos. Arriba: A.Díaz, J.González, Navarrete, Capuano, Villa y J.García. Agachados: Devizia, Zito, Barrera, Fandiño y E.García

Una sorpresa mayúscula deparó la fecha 22. En su estadio, Independiente fue vencido por Atlanta por 1-0 con un gol marcado por Martino, el jugador más bajo del fútbol argentino (1,50m). Esa derrota fue aprovechada por River, que al vencer a Lanús por 2-1, pasó a encabezar las posiciones. En Caballito y ante una extraordinaria concurrencia, Racing le ganó a Boca 2-1. En ese partido fue expulsado Cherro, quien no volvió a jugar. Asó concluyó con un broche poco digno su excepcional trayectoria.
Siete días más tarde se registró una espectacular goleada de Racing ante Platense por 8-2. En fechas siguientes, también goleó a Estudiantes LP y Lanús por el mismo resultado, logrando algo que ningún equipo alcanzó ni repitió.
Boca, vencido por Huracán en Parque Patricios, no había registrado victorias en la segunda rueda.

En la 24° fecha, River superó a Independiente como visitante por 3-1. A partir de esa derrota, el conjunto de Avellaneda se repuso y ganó los últimos 10 partidos. En la escena, Bello detiene la pelota ante un salto de Rongo

La fecha siguiente se disputó uno de los partidos de fundamental importancia para la definición del campeonato. Independiente recibió la visita de River, que logró una valiosa victoria y estiró su ventaja a 3 unidades, aunque aún debía quedar libre. Lo curioso de esa derrota de Independiente fue que a partir de ese entonces modificó la formación de su equipo. Leguizamón reemplazó a Spinetto y Sastre pasó a desempeñarse como insider. Estos cambios gravitaron favorablemente, al punto de ganar consecutivamente los 10 últimos partidos.
Gracias al tremendo empate en 5 entre River y San Lorenzo, Independiente, que venció a Gimnasia en La Plata, se pudo acercar al líder. Los resultados registrados en las fechas siguientes no modificaron las posiciones en los primeros lugares de la clasificación, donde los líderes estaban separados por dos puntos. Pero, en realidad, se encontraban virtualmente igualados, ya que River debía quedar libre.

Un resultado que tuvo decisiva influencia en la definición del torneo se produjo en la fecha 28. En Caballito, Ferro venció a River por 2-1. Y como Independiente se impuso ante Huracán por 4-1, los dos aspirantes al título quedaron igualados en la punta del torneo. Esa paridad se quebró el domingo siguiente, cuando el equipo de Avellaneda derrotó a Vélez en Villa Luro y River quedó libre.

Independiente, un formidable campeón con 115 goles a favor. De pie: Bello, Leguizamón, Coletta, Franzolini, Balborria y Zorrila. Hincados: Vilariño, De la Mata, Erico, Sastre y C.Martínez

La disputa de las fechas siguientes no produjeron variantes relevantes en cuanto a los dos equipos que ocuparon los dos primeros puestos, pues ambos rivales ganaron categóricamente todos los partidos que disputaron. Independiente no sintió la presión de llevar la ventaja y depender de si mismo, y cerró su magnífico torneo tras golear a Lanús por 8-2.
Talleres RE y Almagro, que ocuparon los últimos dos puestos, perdieron la categoría.

La recuperación producida en el campeonato de 1937 tuvo una expresiva consolidación en 1938. La ya insinuada aparición de eficaces delanteros resultó más notoria durante esta temporada, como lo demuestra el hecho de que, según la historia, se trató del campeonato en el que se convirtieron la mayor cantidad de goles.
El afianzamiento en la aptitud de nuestro fútbol fue evidente. Lamentablemente, la desidia y desorganización de nuestros dirigentes impidió que esa gran capacidad futbolística tuviera oportunidad de manifestarse en el Campeonato Mundial jugado en Francia. Fue un aislamiento improcedente e inexplicable, sólo justificado por el deseo de dar preferencia al campeonato de Primera División.
Inclusive, la inauguración de un soberbio estadio consolidó un prestigio que hubiera necesitado de una conquista mundial. Y esa negligencia privó al fútbol argentino de una posibilidad excelente para concretarla.
La aptitud reiteradamente demostrada por Independiente lo consagró no tan sólo como el mejor equipo del año, sino también como uno de los grandes conjuntos de la historia del profesionalismo.

Historia del fútbol argentino - 1938 - Torneo parejo

Resultó un acontecimiento extraordinario la inauguración del gran estadio de River, el 25 de mayo, cuando los locales enfrentaron a Peñarol en un amistoso. El primer partido oficial disputado en el luego "Monumental", deparó un traspié de proporciones. Independiente venció al equipo local por 4-2 y como consecuencia de esa caída, San Lorenzo alcanzó al "millonario" en la punta.

Cancha de River Plate en el año 1938

El enfrentamiento entre los dos punteros constituyó la mayor atracción de la 8va fecha. En Boedo, igualaron en dos goles, lo que produjo un triple empate en el liderazgo ya que también se sumó Independiente. En esa fecha, Almagro ganó su primer partido: venció a Ferro por 4-1 y se reforzó con jugadores de calidad, como fue el caso del consagrado Orsi.
En la 10ma jornada se produjo un sorpresivo revés de River frente a Atlanta en Villa Crespo, tras caer 2-1. Independiente igualó con Racing en el clásico de Avellaneda (2-2) y San Lorenzo, quien quedó solitariamente primero, derrotó a Talleres RE por 5-3.
La jornada siguiente no produjo novedades en los primeros puestos, pero al jugarse la 12da fecha y al quedar libre River, Independiente venció a Vélez por 7-1 gracias a la notable actuación de Arsenio Erico, quien convirtió 5 goles. San Lorenzo en su cancha derrotó a Huracán por 4-2, en un partido lleno de incidentes. La lucha también fue reñida en la retaguardia: Lanús 6 unidades, Almagro 5 y Talleres RE 4, fueron los más comprometidos.
Una semana después, Independiente sufrió la segunda caída del torneo frente a Chacarita, que en Villa Crespo, le ganó 2-0. En La Plata también perdió River ante Gimnasia por 3-2. Esa tarde debutó en el "lobo" el arquero Yustrich, que se había destacado en Boca. Los marcadores favorecieron a San Lorenzo, que tras ganarle a Vélez por 2-0 en Villa Luro, quedó como líder con 21 puntos, perseguido por Independiente con 19.

La formación de Chacarita Juniors. De pie: Zava, Santlá, Terzolo, Araiz, De Genaro e I.López. Debajo: R.Rodríguez, Barros, Palomino, Galateo y Barraza

Pero la serie de Chacarita no se detuvo ahí, sino que siguió el domingo siguiente. La víctima de turno fue San Lorenzo, al que derrotó en Boedo por 4-3, con lo que logró dos victorias consecutivas ante los punteros del campeonato, hazaña difícil de alcanzar.
Independiente se rehabilitó al vencer en su estadio a Boca por 3-0, con tres goles de De la Mata. River, por su parte, perdió un valioso punto tras empatar en su flamante reducto ante Talleres RE. Por lo tanto, "rojos" y "cuervos" volvieron a quedar igualados en el primer puesto con 21 puntos, seguidos por "académicos" y "millonarios" con 17.

Para el partido contra Racing en Avellaneda, River incluyó en la alineación titular al centrodelantero Rongo, quien formó parte del campeón de 1937 pero también del descendido Argentinos Juniors en el mismo año. A partir de ese encuentro, el futbolista demostró una eficacia excepcional y convirtió, en el segundo tiempo, los 3 goles con los que el visitante se impuso por 3-2.
En Caballito, Boca y San Lorenzo disputaron, ante una gran cantidad de público, un encuentro rico en pasajes emocionantes que terminó igualado en tres tantos. Gracias a este resultado, Independiente fue líder absoluto por su victoria ante Platense por 5-2.
En la jornada siguiente, volvió a llamar la atención Rongo, que marcó 3 goles en el encuentro que su equipo ganó por 5-1 ante Huracán.
La primera rueda terminó con un sorpresivo empate de Lanús, que ocupaba la antepenúltima posición, ante Independiente en tres goles. Pese a ello, el "rojo" mantuvo el liderazgo gracias a la derrota sufrida por San Lorenzo ante Estudiantes por 3-1. Y al imponerse ante Vélez en Villa Luro, River vio agigantar la figura de su delantero, que nuevamente convirtió un hat-trick.
A la mitad del torneo Independiente no sólo comandó las primeras posiciones, sino que convirtió la cantidad excepcional de 60 goles. Lo seguían San Lorenzo con 24 y River con 23, mientras que en el fondo de la tabla estaban Almagro con 8 y Talleres RE con 6.

Historia del fútbol argentino - 1938 - Jerarquía

Los sistemas ofensivos de la época aportaron un récord no superado: casi 5 goles por partido. Hubo tantos en los 306 partidos y 13 jugadores marcaron más de 20. El campeonato quedó en manos de una formación de jerarquía.

Pródigo en transferencias resulto el preludio del campeonato de 1938. River, que tuvo un plantel formado por destacados futbolistas, lo reforzó con la adquisición del arquero uruguayo Juan Besuzzo y del insider Oscar De Dovitis.
Boca también contrató a un portero, Juan Estrada, quien en otras temporadas se lució en Huracán. Además, se sumaron el medio Arcadio López, proveniente de Ferro, a quién se pagó con una tribuna del viejo estadio de Boca en vez de dinero, el delantero Daniel Sabio, el zaguero Valussi, que regresó de Tigre, y la vuelta de Benítez Cáceres, que por un conflicto con los dirigentes no jugaba desde 1937.
Racing consiguió los pases de Juan Ignacio Devizia y Francisco Fandiño, de Argentinos Juniors; del zaguero Luis Villa, de Lanús, y del centrodelantero Naón, de último paso en el "ciclón".
Justamente, a San Lorenzo arribaron Agustín Cosso, proveniente de Vélez, Alberto Lorenzo, ex delantero de Talleres RE, y Gabino Ballesteros, hábil insider rosarino.
Independiente sólo incorporó a Spinetto, proveniente del "fortín", aunque no se acopló a la estructura del equipo, y al delantero rosarino José Vilariño.

Juan Besuzzo y Juan Estrada, porteros de River Plate y Boca Juniors en 1938

Con un programa apenas discreto inició el campeonato de 1938. La mayor recaudación ($14.631) se registró en Caballito, donde Ferro y Boca igualaron. Esa misma tarde, Independiente venció a Tigre por 6-2; Almagro, quien fue el primer equipo en ascender a la Primera División, debutó con derrota ante Estudiantes LP en la cancha de Boca.
El clásico entre Boca y River se jugó en la 2da jornada. Se trató de una ocasión especial para el "xeneize", ya que actuó por última vez en el estadio que se inauguró en 1924. Pero nada valieron los recuerdos ya que su eterno rival lo venció por 2-1.
La 3era jornada dejó como hecho más destacado el importante triunfo de San Lorenzo por 2-0 ante Independiente en Boedo.
En los 8 partidos de la 4ta fecha se anotaron 56 tantos, cifra nunca alcanzada hasta ese entonces y que sólo fue igualada poco antes de terminar este mismo certamen. La mayor goleada la concretó Independiente, que apabulló al humilde Almagro por 9-0. Boca jugó por primera vez como local en al cancha de Ferro y venció a Talleres RE por 7-1, con 4 goles del reaparecido Benítez Cáceres. Por su parte, River venció en La Plata a Estudiantes por 8-1. José Manuel Moreno, de cabeza, marcó 3 goles.
Siete días más tarde, Avellaneda fue escenario del triunfo que conquistó Racing ante Boca por 3-2. River, que esa tarde fue local en Platense, goleó a Lanús por 4-0 y quedó como líder con 9 puntos.
En la 6ta jornada "calamares" y "académicos" protagonizaron un partido espectacular. El visitante ganaba 4-0 cuando terminó el primer tiempo, pero nadie imaginó la gran reacción que tuvo Platense, que descontó ventajas hasta que en el minuto 34 consiguió el ansiado empate. Minutos después, aún más heroico, pasó a ganar el encuentro, lo que produciría un caso único en el profesionalismo (perder 0-4 y ganar 5-4) aunque Racing logró igualarlo y el partido finalizó en tablas.

miércoles, 3 de junio de 2020

Historia del fútbol argentino - 1937 - Sudamericano

El campeonato disputado en Buenos Aires en 1937 tuvo la curiosa particularidad de haberse jugado en dos años. Se inició el 27 de diciembre de 1936 y finalizó el 1 de febrero del siguiente. Realmente resultó extraño que un certamen, que tuvo solo participaron 6 equipos, sea tan prolongado extendiendo la estadía de las Selecciones.

Para esta Copa, fueron elegidas las canchas de San Lorenzo y Boca.  Este último fue dotado de iluminación artificial y por eso fue el primer Sudamericano que se disputó en franja nocturna.
El poderoso seleccionado argentino encontró una tenaz resistencia en su camino al título, especialmente de parte del equipo brasileño, que produjo excelentes desempeños y logró igualar el primer puesto con la representación local.

  El equipo argentino campeón del Sudamericano 1937. Arriba: Sastre, Tarrío, Bello, Minella, Iribarren y C.Martínez. Debajo: Guaita, Varallo, Zozaya, Scopelli y E.García

Los uruguayos cumplieron con actuaciones escasamente convincentes, aunque obtuvieron un triunfo resonante frente a los argentinos por 3-2, con lo que se rehabilitaron, en cierta medida, de sus mediocres desempeños.
El partido desempate, matizado con varios incidentes, finalizó alrededor de la una de la madrugada. El conjunto argentino se impuso por 2-0 en tiempo suplementario. El autor de los goles fue Vicente de la Mata, un hábil y juvenil jugador rosarino, quien precisamente nació a la fama en ese torneo.
De esta manera, Argentina alcanzó su quinto título a nivel Selección.
El máximo goleador del torneo fue el chileno Raúl Toro, con 7 tantos.


Historia del fútbol argentino - 1937 - River, imparable

José Manuel Moreno fue el goleador y la figura de River campeón y, por encima de eso, el hombre que llenó el vacío que, con su lenta pero irremediable declinación, empezó a dejar Bernabé Ferreyra.

José Manuel Moreno, figura del River Plate campeón de 1937

En la 29na fecha River recibió la visita de Racing, que cumplió con una discreta campaña y no apareció como un rival de cuidado. Más aún, porque presentó un equipo improvisado, con varios suplentes. El primer tiempo confirmó tal presunción, ya que a su término, el loca vencía por 4-1. Lo notable ocurrió después, cuando Racing, en una sorprendente reacción, empató en 4 y, sobre el final, estuvo a punto ed marcar un gol que hubiese sido histórico. Sin duda, fue esta la actuación más recordada de "La Academia" en el torneo.
Quince días más tarde, River logró una espectacular victoria ante San Lorenzo por 6-1. Fue el último partido que se jugó en la avenida Alvear, ya que la Municipalidad intimó al "millonario" para que abandone el predio que ocupó.
A tres jornadas de la finalización del torneo, River lideró con 52 mientras que el escolta, Independiente, tenía 58. En la antepenúltima fecha el líder se impuso ante Argentinos Juniors por 6-0 y se coronó bicampeón del fútbol profesional por primera vez en su historia. Para ratificar sus méritos, siete días después venció a Boca por 3-2 en Boedo, y cerró su campaña tras vencer ajustadamente a Platense por 3-2. River consiguió, durante la segunda rueda, 31 de los 34 puntos en juego.

River Plate, brillante campeón de 1937. Parados: Malazzo, Vassini, A.López, Cuello, Bernabé Ferreyra y José Manuel Moreno. Debajo: Coloccini, Vaschetto, Rodolfi, Pedernera y Peucelle

En la temporada de 1937 se logró contener la continua merma en la venta de entradas que se había registrado en los tres años anteriores. Si bien el aumento registrado en relación a 1936 no fue muy significativo, sirvió al menos como punto de partida para una recuperación que se acentuó los años siguientes.
Por otra parte, se consolidó la capacidad de River, mucho más eficaz que en 1936. Factores fundamentales de la solvencia demostrada por el campeón de la temporada fueron Moreno, máximo goleador del equipo pese a la presencia de Bernabé Ferreyra, cuya estrella tendía a palidecer; Pedernera, Paucelle, Minella y Vaschetto, jugadores de gran calibre.
También Independiente mostró que su nivel estuvo en alza. A ello contribuyó De la Mata, quien pronto mostró sus virtudes. Con un compañero tan hábil, aumentó la eficiencia de Erico, que ese año conquistó la excepcional cifra de 47 goles. En ese tiempo se gestó uno de los mejores equipos del profesionalismo, que años siguientes dio gratas muestras.
Los descensos, que por primera vez se implantaron en este ciclo, no agregaron al certamen ningún complemento novedoso, porque rápidamente quedaron determinados cuales serían los dos equipos que perderían la categoría.

Se convirtieron 1.285 goles (récord absoluto)

El campeón fue el equipo que más partidos ganó y el que menos perdió. Además, junto a su escolta, fueron los conjuntos que más goles marcaron el torneo. Hay que sumar a Boca al dato de que por primera vez en el profesionalismo, tres equipos en un mismo certamen convirtieron más de 100 goles.

El primer ascenso a la máxima categoría del fútbol argentino lo logró Almagro, tras ser el mejor en la segunda división. 17 equipos pelearon por el título y tan sólo de disputó una rueda, donde el "tricolor" obtuvo más puntos que el resto.



En el torneo de 1937 se dio un curioso caso con el centrodelantero Luis María Rongo de River. En la primera rueda integró el conjunto que fue campeón, pero en la segunda, transferido a préstamo a Argentinos Juniors, le tocó perder la categoría.
En un mismo año Rongo tuvo la doble experiencia de estar en planteles que cumplieron campañas opuestas. El jugador regresó al "millonario" en 1938, donde estableció un récord excepcional tras lograr un promedio de eficacia anual insuperable.

Historia del fútbol argentino - 1938 - Mundial de Francia

Los dos primeros campeonatos mundiales constituyeron importantes éxitos económicos. Ello alentó notablemente a continuar con su realización,...